Los kilómetros más especiales del Camino de Invierno
Escrito por Ernesto Diaz el 30 de julio de 2022
«El Camino es más importante que aquello que te llevó a caminar», con esta frase de Paulo Coelho comenzamos a describir las tres últimas etapas del Camino de Invierno antes de unirse en las proximidades de Lalín con la Ruta Vía de la Plata, y el motivo no es más que animarle, a través del significado que implican estas palabras, a vivir la enriquecedora experiencia de este Camino, uno de los más íntimos y extraordinarios que puede elegir el peregrino. Recorrerlo es, ante todo, un encuentro con uno mismo con momentos de soledad y paisajes de gran belleza.
En nuestro anterior artículo habíamos llegado a Monforte de Lemos, población de la que en esta etapa salimos cruzando su Puente Viejo sobre el río Cabe. Atravesaremos en estos primeros kilómetros pequeños núcleos como A Corga, Regueiro, A Broza…, y poco después, el Camino nos deleitará con una edificación típica de Galicia, el Pazo do Reguengo, originario del siglo XV; un edifico digno de ver. A partir de aquí, tendremos un tramo de esos difíciles de olvidar por su belleza, con las típicas corredoiras gallegas hasta la población de Piñeiro.
Seguimos, O Camiño Grande, Vendanova, Montecelo… y a unos pocos metros, uno de los puntos clave de este Camino, una marquesina con un mojón que marca el km 112, donde hay que girar a la izquierda, pero es muy recomendable avanzar unos pasos, unos 80 metros adelante, para visitar la Iglesia de San Paio de Diomondi del siglo XII.
Desde el citado mojón, comienza la parte más bonita de esta etapa, y podría afirmarse que de todo el Camino de Invierno. Bajaremos de forma muy pronunciada por lo que fue una antigua calzada romana hasta adentrarnos en un precioso bosque, para luego salir a la famosa Ribeira Sacra, zona protegida declarada Bien de Interés Cultural, y en la que destacan las imponentes vistas de sus miradores, interesantes iglesias y conventos, y sobre todo sus viñedos, plantados en terrazas, algunas con pendientes del 80%, ofreciendo un impactante y maravilloso espectáculo visual.
FUENTE: LA RAZÓN
Auxiliado un peregrino que hacía el Camino en silla de ruedas