¿Cuáles son las rutas más largas que pueden hacerse a pie por Europa?
Escrito por Ernesto Diaz el 24 de septiembre de 2023
Una vieja anécdota muy famosa del cineasta Werner Herzog cuenta que, cuando descubrió que su vieja amiga Lotte Eisner se encontraba muy enferma y estaba a punto de morir, se hizo a sí mismo la desquiciante promesa de ir caminando en solitario desde Múnich a París con la idea de que así se curaría. Más que una muestra del férreo carácter alemán del director de Aguirre, la cólera de Dios, esto nos quiere enseñar aquello de que caminante no hay camino y que en Europa (a diferencia de Estados Unidos), las distancias son más o menos salvables. La promesa de Herzog «funcionó», por cierto, y Eisner no murió hasta nueve años después.
Pese a que Europa no tiene la consistencia de continente unificado que pueden tener otros, como el amigo americano, debido a antiguas rencillas y rencores mal disimulados, sí que es posible viajar de una punta a otra llevando el pasaporte a mano. Muchos jóvenes eligen conocer el viejo continente de esta manera, con las posibilidades que el Interrail les ofrece. Si en lugar de acostarnos en nuestra cama esta noche cogiéramos el coche y nos lanzáramos a la aventura, llegaríamos a París al amanecer (aproximadamente) o a la frontera suiza. Sin embargo, parece menos posible hacer los mismos recorridos a pie.
¿O no? ¿Qué rutas pueden hacerse de esta manera por el viejo continente?
El Sentiero Italiano
Considerado el trekking más largo del mundo, con 7.000 kilómetros (es decir, ocho veces el Camino de Santiago), el Sendero Italiano atraviesa todo el país y recorre 350 pueblos, grandes montañas, bosques, valles, 15 parques nacionales y seis lugares declarados como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Atraviesa todo el país y recorre 350 pueblos, grandes montañas, bosques, valles, 15 parques nacionales y seis lugares declarados como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO
Va desde los Alpes a Sicilia (o más allá) y por el camino también puedes conocer los Dolomitas, los Apeninos, el Etna o las Montañas Iblei, entre otros. Es relativamente reciente: fue creado en el 95 por el Club Alpino Italiano demostrando que en el país vecino todos los caminos llevan a Roma, pero no tienen por qué terminar ahí.
La Ruta de los Sultanes
Conocido en realidad como el Sendero del sultán, hace referencia al sultán Solimán I, que fue conquistando Europa mientras la recorría (literalmente). Está situado entre Viena y Estambul y es muy antiguo. Aunque durante mucho tiempo ha estado en desuso, en la actualidad se está volviendo a reactivar porque permite conocer muchos lugares que no son especialmente turísticos, y empaparte de la idiosincrasia de cada pueblo.
Comienza en Viena, siguiendo por Eslovaquia, Hungría, Croacia, Serbia, Rumanía, Bulgaria, bordeando el norte de Grecia y culminando en Estambul
Se encuentra situado entre Viena y Estambul y transcurre a lo largo de, nada menos, que nueve países, recorriendo el borde de Graz y Klagenfurt hasta llegar a Eslovaquia, para seguir por Hungría, Croacia, Serbia, Rumanía, Bulgaria, bordeando el norte de Grecia y culminando en Estambul (Turquía).
Ruta de Gales
Un sendero aún más joven, inaugurado en mayo de 2012, que recorre toda la costa de Gales en Reino Unido. Desde Chepstow en el sur, desde donde parte, hasta Queensferry en el norte. En total son unos 1.400 kilómetros en los que conocerás paisajes de todo tipo (por lo que es mejor ir preparado en calzado): playas, acantilados o paisajes más industriales típicos de la zona. La ruta pasa, además, por once reservas naturales.
Países que puedes hacer caminando
Igual que decíamos que Italia puede recorrerse de punta a punta, como muestra su famoso sendero, hay otros países en Europa que también pueden hacerse caminando. Entre ellos: el principado de Andorra, que nos pilla cerca, Luxemburgo, que puede recorrerse en cosa de diez días y cuya ruta son unos 210 kilómetros. También se pueden hacer a pie Irlanda (unos 600 kilómetros entre Dublín y Bray Head), los increíbles paisajes de Islandia (unos 450 kilómetros) o Liechtenstein que son unos 25 kilómetros y se puede recorrer en pocos días, si te gusta caminar pero no te quedan muchos días de vacaciones.