La imagen más famosa de Benidorm, la de sol, playa y rascacielos, convive con una aventura mucho más austera y espiritual: el Camino de Santiago. Desde hace años, la ciudad alicantina se ha consolidado como el punto de inicio de un ramal oficial de la Ruta del Sureste (también conocida como Camino de Levante-Sureste), ofreciendo a los peregrinos una travesía que se cuenta entre las más largas de la península.

Dejando atrás el mar Mediterráneo, los caminantes inician un periplo de más de 1.100 kilómetros hasta la Catedral de Santiago de Compostela.


La Ruta Central: Mar y Montaña antes de La Meseta

El Camino de Santiago desde Benidorm arranca oficialmente en la emblemática Iglesia de San Jaime y Santa Ana, un mirador espectacular sobre la playa. Las primeras etapas abandonan rápidamente la costa para adentrarse en el interior montañoso de Alicante.

  • Distancia Total Estimada: Aproximadamente 1.140 a 1.216 kilómetros, dependiendo de las variantes.
  • Duración: Los peregrinos experimentados suelen calcular unos 40 a 45 días para completar la ruta a pie.

El trazado desde Benidorm se considera un Ramal Centro que enlaza con el Camino del Sureste (o Vía de la Lana). Los primeros kilómetros atraviesan poblaciones del interior de Alicante, incluyendo:

Etapa InicialLocalidades ClaveDistancia Aprox.
Etapa 1Benidorm – Relleu25 – 27 km
Etapa 2Relleu – Torremanzanas19 – 20 km
Etapa 3Torremanzanas – Ibi/Onil30 km
Etapa 4Ibi/Onil – Villena19 – 29 km

En Villena, la ruta se fusiona con el tronco principal del Camino del Sureste. Desde ahí, la travesía lleva al peregrino a cruzar la Comunidad Valenciana, la Región de Murcia, Castilla-La Mancha y, finalmente, enlazar con la Vía de la Plata hasta Astorga y, desde allí, con el famoso Camino Francés hasta Santiago.


Una Ruta de Autenticidad y Dureza

Peregrinos que han completado el recorrido, como Álvaro Lazaga, han destacado la dureza de las primeras etapas, marcadas por el terreno montañoso y la ausencia de las grandes infraestructuras de otros Caminos más transitados.

Testimonios recientes señalan que, especialmente en el tramo de La Mancha, es común caminar durante días sin cruzarse con otros peregrinos, lo que añade un componente de autenticidad y soledad muy valorado por quienes buscan una experiencia profunda.

La Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Alicante ha sido clave en la señalización y revitalización de este ramal, asegurando que las placas con la concha y las flechas guíen al caminante desde el mismo centro de Benidorm, transformando al turista de la Costa Blanca en un auténtico romero.