El Camino de Santiago antes de salir de prisión

El Camino de Santiago antes de salir de prisión. Siete internos del Centro Penitenciario La Moraleja de Dueñas (Palencia) llegaron a Compostela a finales de mayo después de recorrer cinco etapas del Camino de Santiago desde Ourense. Compartieron la experiencia con personal del equipo técnico y directivo de la prisión y tuvieron como guía a un educador, Fermín, que es un gran amante de las rutas jacobeas.

Elisa Carro, subdirectora de tratamiento, explica que en años anteriores hicieron etapas en Castilla y León. En esta ocasión, en homenaje a Fermín, para quien será su último camino en el trabajo porque se jubila, se trasladaron a Galicia. «Se extraen cosas positivas, sobre todo a nivel humano y personal. Todos aprendemos de todos. Los vemos disfrutar y cómo valoran las cosas. Hay personas que en su vida han vivido situaciones complicadas», explica. Durante el camino tuvieron momentos de dificultad: aparecían el cansancio, las rozaduras o las temidas ampollas. «Su frase era no hay dolor», asegura Carro. Se la decían unos a otros, apoyándose.

Fermín, el educador, explica que en el centro trabajan con los internos en un módulo de deshabituación de las drogas y otras adicciones. Estas salidas forman parte de la preparación para los reclusos que están próximos a cumplir su pena. «Cuando se va acercando la hora de salir, hacemos jornadas de preparación a la libertad o a futuros permisos. Por falta de costumbre les faltan habilidades sociales. Se trata de que vean la vida fuera y de poner en práctica lo que trabajamos sobre respeto, compañerismo y abstinencia de drogas», detalla.

El comportamiento del grupo en los albergues fue bueno. Conviven diariamente en el módulo. «Les he contado cómo hay que compartir con otras personas. Ya están habituados a vivir con gente, pero dentro de la prisión es muy diferente. Se portan bien, como cualquier peregrino. Además vienen tutelados por profesionales», añade el educador.

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FUENTE: LA VOZ DE GALICIA