Euskadi en bicicleta a través Camino Vasco del Interior
Escrito por Ernesto Diaz el 24 de noviembre de 2022
Euskadi está atravesado de norte a sur por un camino ancestral, cuyo origen se remonta a tiempos del dominio romano, constituyendo desde entonces una vía de comunicación de primer orden. Los ingenieros no hicieron otra cosa que aprovechar ancestrales veredas de pastores para construir una calzada de la que aún hoy conservamos algunos, aunque escasos, vestigios.
Siglos más tarde, en la Edad Media, peregrinos procedentes del suroeste de Francia aprovecharon esta calzada en su camino hacia la tumba del apóstol, como atestiguan las referencias y los templos con advocación jacobea que se encuentran a lo largo de la ruta. Ahora bien, aunque estamos hablando de uno de los caminos de peregrinación más antiguos, es evidente que posteriormente este llamado Camino Vasco del Interior o Vía de Bayona no tuvo el éxito que sí tuvieron otros caminos de peregrinación medievales, como los que cruzaban la frontera por Roncesvalles y Somport que configuraron el más popular Camino Francés.
Tras un largo periodo de silencio, el Camino Vasco del Interior ha sido rescatado del olvido por las asociaciones de Amigos del Camino y el propio Gobierno Vasco, resurgiendo cada día con más fuerza y siendo reconocido por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.
Y es que el hecho de atravesar los territorios de Gipuzkoa y Álava le convierten en uno de los mejores espejos de Euskadi, pedaleando por un itinerario ideal para conocer en tres días un país heterogéneo y de enormes contrastes: paisajes costeros, abruptas montañas, húmedos bosques, fértiles huertas, grandes extensiones de secano, llanadas inmensas, localidades y comarcas fuertemente industrializadas, entornos rurales y un sinfín de bellas estampas más forman parte de su recorrido. De esta manera el viajero, hoy en bicicleta, podrá admirar una extraordinaria diversidad geográfica, histórica, social, económica y cultural en menos de 200 km.
FUENTE: EL DIARIO