la catedral de león: la luz del gótico
Escrito por Ernesto Diaz el 14 de octubre de 2023
Toledo la Rica, Oviedo la Santa, Salamanca la Fuerte, León la Bella: así se refería un antiguo proverbio a las cuatro principales catedrales de la Corona de Castilla en la Edad Media. Una destacaba por sus inmensas propiedades, otra por su vinculación con la Reconquista, la tercera por su mole, mientras que la de León brillaba por la elegancia y gracia de sus proporciones.
En efecto, la catedral leonesa, la Pulchra Leonina, es el ejemplo más acabado de la adopción en España del arte gótico francés, y ha sido siempre objeto de admiración por su estructura casi flotante, con los muros sustituidos por inmensos ventanales vidriados. Como escribía Manuel Risco con el típico estilo de un erudito del siglo XVIII: «El artífice que la fabricó fue único en su arte… Y es cosa que espanta ver en él tanta singularidad de ingenio y de atrevimiento, pues osó poner en ejecución una obra que los presentes la temen y se espantan de que se sustente y tenga en pie».
La construcción de Santa María de Regla fue consecuencia del auge del camino de Santiago. En el siglo XIII, en toda la Cristiandad latina ninguna ruta de peregrinación era más concurrida que la que conducía desde los pasos de los Pirineos a Compostela, ni distribuía mayor riqueza. Fueron años de acelerado crecimiento de las ciudades atravesadas por el Camino y, al mismo tiempo, de plena apertura a las influencias culturales y artísticas del exterior, transmitidas por negociantes y mercaderes así como por las nuevas órdenes mendicantes, de franciscanos y dominicos, que se establecieron a lo largo del Camino. La arquitectura gótica constituyó la máxima expresión del impulso renovador que se vivió en esos decenios.
La expansión del estilo gótico se debió también al apoyo de la monarquía castellana. Fernando III, que en 1230 unió Castilla y León bajo una sola Corona y que protagonizó las grandes conquistas en Andalucía, se veía a sí mismo ante todo como un servidor de la Iglesia; no en vano fue considerado un santo, como su contemporáneo Luis IX de Francia. Por ello impulsó la construcción de grandes catedrales góticas, ofreciendo tierras a las diócesis y generosos donativos para la salvación de su alma y de su numerosa familia.
FUENTE: NATIONAL GEOGRAFHIC